La Navidad de Leonardo Boff

15:42 Posted by Perro Senil.


La Navidad de antes: vieja y siempre nueva

2011-12-23



Vengo de hace tiempo, de los años 40 del siglo pasado, de un tiempo en que Papá Noel todavía no había llegado en su trineo. En nuestras colonias italianas, alemanas y polacas, exploradoras de la región de Concórdia (Santa Catarina), conocida por ser la sede de la Sadia y de la Seara con sus excelentes productos de carne, sólo se conocía al Niño Jesús. Eran tiempos de fe ingenua y profunda que informaba todos los detalles de la vida. Para nosotros los niños, la Navidad era la culminación del año, preparada y anhelada. Por fín venía el niño Jesús con su mulita (musseta en veneto) a traernos regalos.

La región tenía pinares hasta donde se perdía la vista y era fácil encontrar un hermoso pino. Lo adornábamos con los materiales rudimentarios de aquella región todavía en construcción. Utilizábamos papel de colores, de celofán y pinturas que nosotros mismos hacíamos en la escuela. La madre hacía pan de miel con distintas figuras, humanas y de bichitos, que colgábamos de las ramas del pino. En la punta siempre había una estrella grande recubierta de papel amarillo. Debajo, alrededor del pino, montábamos el pesebre, hecho con figuritas de papel recortadas de una revista a la que mi padre, maestro de escuela, estaba suscrito. Ahí estaba el Buen José, María, toda recogida, los Reyes Magos, los pastores, las ovejitas, el buey y la mula, algunos perros, y los ángeles cantores, que colgábamos en las ramas más bajas. Y naturalmente, en el centro, el Niño Jesús, que, al verlo casi desnudo, lo imaginábamos titiritando de frío y nos llenábamos de compasión.

Vivíamos el tiempo glorioso del mito. El mito traduce mejor la verdad que la pura y simple descripción histórica. ¿Cómo hablar de un Dios que se hace niño, del misterio del ser humano, de su salvación, del bien y del mal, sino contando historias y proyectando mitos que revelan el sentido profundo del acontecimiento? Los relatos del nacimiento de Jesús que están en los evangelios, contienen elementos históricos, pero para enfatizar su significado religioso, vienen revestidos de lenguaje mitológico y simbólico. Para nosotros niños, todo eso eran verdades que asumíamos con entusiamo.

Antes de introducirse el decimotercer salario, los profesores recibían una paga extra por Navidad. Mi padre gastaba todo ese dinero para comprar regalos a sus 11 hijos. Eran regalos que venían de lejos y todos instructivos: una baraja con los nombres de los músicos importantes, de pintores célebres, cuyos nombres nos costaba trabajo pronunciar, y nos reíamos de las barbas que tenían, de su nariz o de cualquier otro detalle. Un regalo que tuvo mucho éxito: una caja con materiales para construir una casa o un castillo. Los más mayores empezábamos a participar de la modernidad: recibíamos un jeep o un automóvil que se movían dándoles cuerda, o una rueda que al girar lanzaba chispas, y otras cosas por el estilo.

Para que no hubiese peleas, cada regalo tenía escrito debajo el nombre del hijo o de la hija. Y después comenzaban las negociaciones y los cambalaches. La prueba infalible de que el Niño Jesús había pasado por casa era la desaparición de los manojos de hierba fresca. Corríamos a comprobarlo. Y así era, la musseta se lo había comido todo.

Hoy vivimos los tiempos de la razón y de la desmitificación. Pero esto vale solo para los adultos. Los niños, ahora con Papa Noel y ya no con el Niño Jesús, viven el mundo encantado de los sueños. El viejito bonachón trae regalos y da buenos consejos. Como tengo barba blanca, no hay niño o niña que pase por mi lado y no me llame Papá Noel. Yo les digo que no soy Papá Noel sino su hermano, que vengo a observar si los niños hacen todo como se debe y después se lo cuento todo a Papá Noel para que les traiga un buen regalo. Así y todo, muchos dudan. Se acercan, me tocan la barba y dicen: No, usted es Papá Noel mismo. Soy una persona como cualquier otra, pero el mito me hace ser Papá Noel de verdad.

Si nosotros adultos, hijos de la crítica y la desmitificación, ya no conseguimos encantarnos, permitamos que nuestros hijos e hijas se encanten y gocen del reino mágico de la fantasía. Su existencia estará llena de sentido y de alegría. ¿Qué más queremos para Navidad sino esos dones preciosos que Jesús quiso también traer a este mundo?


Entender el mundo VII: «Modelo Kremer»

5:08 Posted by Perro Senil.


El economista Michael Kremer ofreció explicar un millón de años de historia mediante un modelo de crecimiento basado en una ecuación. Para Kremer existe un índice de progreso tecnológico que es proporcional a la población mundial. Supuso que, si al año, se produce una idea realmente brillante por cada mil millones de personas, entonces, en una población mundial de sólo un millón de individuos -los Homo erectus que había en el año 300.000 a.C.- habrían tenido esa idea esplendente sólo cada mil años. Pero como para el año 1800, cuando surgió la Revolución Industrial, había mil millones de personas en el mundo, el índice de innovación debió, entonces, aumentar a una deslumbrante idea por año. Y hacia el año 1930, debía aparecer una idea revolucionaria cada seis meses. Y con los seis mil millones actuales ese tipo de ideas debán generarse cada dos meses. Tal es lo que plantea el modelo Kramer (Hardford, 2008: 301 y 302).

El modelo es absurdo, pero cuadra perfectamente con los datos. Los cálculos previstos en el  modelo cuadran desconcertantemente bien con la realidad histórica. Las grandes poblaciones son buenas para la innovación. A favor de la idea se puede citar lo que sucedió cuando hace once mil años los glaciares se replegaron y, como consecuencia de este hecho climático, un istmo en cierta región del mundo quedó sumergido al subir las aguas oceánicas. Éste pasadizo unía Tasmanía a Australia y aTasmania con un diminuto lugar, hoy denominado isla Flinders. En la isla Flinders quedaron aislados algunas decenas de habitantes, se aferraron a ella y alrededor del año 5.000 a. C. se extinguieron. En Tasmania algunos miles de personas pasaron serias dificultades, retrocedieron tecnológicamente, su muy modesto número no era suficiente para que surgieran nuevas ideas. Australia debía tener unos 200.000 habitantes, continuó creciendo, pero muy lentamente. Inventaron el bumerán (íd. 303, 304).

Aborígenes australianos y sus aprestos culturales sofisticados pero escasos.

Arte de los aborígenes australianos.

Los americanos era unos catorce millones de habitantes, su población les permitió desarrollar civilizaciones formidables, y ciudades admirables. Europa tenía al momento del contacto cuatrocientos millones y una ventaja tecnológica abrumadora con respecto a América. Antes de 1798 el progreso de la tecnología era lento, después de ese año la humanidad se acerca a su primer mil de millones de habitantes y, la tecnología dejó de crecer a un ritmo aritmético, para avanzar geométricamente. Lo que la teoría de Malthus señalaba era válido para el largo período precedente , un millón de años, pero para el momento que publica su obra los hechos desmentían su tesis (304, 305).

Todavía resta por ver si Malthus tendrá su revancha, y si el calentamiento global, la pesca excesiva, la erosión del suelo y el agotamiento del petróleo finalmente se burlarán de la tecnología humana y harán que los estándares de vida se derrumben hasta los niveles de subsistencia. Los precios de los bienes de consumo cayeron a lo largo del siglo XX, lo que sugiere que, a pesar de la demanda cada vez más alta, siempre triunfaba una tecnología más desarrollada. A menudo nuestro comportamiento racional fracasa socialmente. Pero nuestro comportamiento racional también puede producir cosas maravillosas. Cuantos más seamos en el mundo viviendo nuestras vidas lógicas, mejores serán nuestras oportunidades de sobrevivir los próximos millones de años (íd. 305).
Tim Harford. La lógica oculta de la vida. Editorial Planeta. Temas de Hoy. Bogotá, 2008. Páginas: 347. Adquirido en el Mesón de Ofertas de la Librería Europa, Maracaibo, Zulia, Venezuela. Precio irrisorio.
Recomienda a tus amistades:
Incomodísimo.com
El Blog que te permite una lectura breve de un libro extenso.
Sin embargo, advertimos, es insustituible la calidad de las autoras o autores, su riqueza temática, la estética de su estilo y la profundidad de su análisis. Leed el original.

Entender el mundo VI: «Universidad de la vida»

6:14 Posted by Perro Senil.


Artículo de 1 página de extensión.

Tim Harford. La lógica oculta de la vida. Editorial Planeta. Temas de Hoy. Bogotá, 2008. Páginas: 347. Adquirido en el Mesón de Ofertas de la Librería Europa, Maracaibo, Zulia, Venezuela. Precio irrisorio.

Los salarios en Nueva York son superiores a la media nacional, pero el verdadero poder de compra es, poco más o menos, de tres cuartas partes del que tendría si viviese en cualquier otra parte de los Estados Unidos. Rock Island, Illinois, es una ciudad que ofrece una combinación  de precios bajos y salarios más bien altos mucho más ventajosa. Nada impide dejar a Nueva York e irse a Rock Island. Sin embargo la brumadora mayoría no se mudan de la urbe cara a la otra más ventajosa, prefieren Nueva York (Hardford, 2008: 219 y 220).

Nueva York ofrece algo que tiende a ser más abundante cuanto más grande es la ciudad (íd. 220). Las nuevas ideas de cualquier tipo son, lo que las ciudades producen. Las ciudades son exitosas por la innovación (íd. 221). Cuando vives en una ciudad conoces personas interesantes. En las ciudades se establecen conexiones con otras personas en torno a algún interés común, que te hacen más inteligente, porque una persona aprende de la otra cada vez que se encuentran, o simplemente te dan conocimientos observándolas (íd. 222, 223).

Square Garden en Nueva York

La ciudad de Nueva York es un sinónimo o metáfora de «multitudes»

La gente acude en masa a las ciudades y esto implica hervideros de actividad intelectual e innovación. Una ciudad exitosa representa una especie de universidad de la vida. Las ciudades son fuentes de innovación y progreso fundamentales para la civilización. Allí se aprende de formas inconsciente, como si los secretos de los oficios estuviesen en el aire. En las ciudades se aprecia el buen trabajo, los inventos, la organización, las cualidades, y si un hombre pone en marcha una nueva idea, otros la adoptan y la combinan, convirtiéndose así en el origen de otras nuevas ideas (íd. 223).

Las ideas están en el aire en las ciudades y no pago por ellas. Todas las personas dan lecciones en las ciudades y no reciben ninguna retribución por eso, se dan a través de los favores, no suponen ningún coste. Eso es lo que los economistas llaman «excedentes», son externalidades positivas de las ciudades. Ese «excedente de conocimiento» que producen las ciudades es algo maravilloso (íd. 225).

El «capital humano» es importante. Cuando el conocimiento está «en el aire» los países se enriquecen. El «capital humano» es importante para el desarrollo. Las personas inteligentes y cultas ofrecen lecciones que enriquecen el aire de las ciudades. En ese ambiente se dan excedentes  de capital humano porque existe un ambiente de aprendizaje (íd. 228). Los trabajadores de las grandes ciudades, por esas razones, son más productivos. Están aprendiendo de las demás y eso les hace más inteligentes, de allí que reciban un plus salario. Porque en las ciudades los salarios crecen (íd. 231). Pero los precios en las ciudades son más altos, debido a la existencia de esa universidad de la vida. Mientras más grande una ciudad más conocimiento existe «en el aire». Los alquileres de un apartamento minúsculo permite visualizar esa «externalidad positiva», es decir, se da la paradoja de que prefiera pagar un alquiler más alto en Nueva York por un departamento minúsculo a pagar uno barato en Rock Island por uno que es amplio (íd. 230).
Recomienda a tus amistades:
Incomodísimo.com
El Blog que te permite una lectura breve de un libro extenso.
Sin embargo, advertimos, es insustituible la calidad de las autoras o autores, su riqueza temática, la estética de su estilo y la profundidad de su análisis. Leed el original.

Entender el mundo V: «Externalidades positivas»

8:25 Posted by Perro Senil.


Artículo de 1 página de extensión.

Tim Harford. La lógica oculta de la vida. Editorial Planeta. Temas de Hoy. Bogotá, 2008. Páginas: 347. Adquirido en el Mesón de Ofertas de la Librería Europa, Maracaibo, Zulia, Venezuela. Precio irrisorio.

El espacio urbano está lleno de seres humanos que interactúan. Cuando las personas salen al parque, éste se llena de vida. Un economista ve detrás de las multitudes las «externalidades positivas». Cuando voy al parque con mi hijo, estoy brindándole una externalidad positiva al parque, la cual es del disfrute de las otras personas que están allí. Es lo opuesto a la contaminación o la congestión del tráfico, en la que se perjudica el grupo humano, es una externalidad negativa, las externalidades positivas son maravillosas (Harford, 2008: 174, 175).


Los economistas valoran las externalidades positivas y externalidades negativas en el ambiente urbano. Estas explican los costes y beneficios en términos de salud y felicidad. El Producto Interno Bruto medidos en índices de bienestar debe utilizar estos instrumentos de la «Nueva Economía», si lo que se desea es construir un mundo que responda a unos fundamentos diferentes.

 Mi asistencia al parque con mi hijo no sólo lo hace más interesante, sino que también lo hace más seguro, es otra externalidad positiva. Las calles vacías parecen peligrosas. Y la arquitectura residencial también puede generar externalidades. Una zona con grandes edificios residenciales, puede alentar los delitos callejeros, por ejemplo, el robo de automóviles. Cada piso adicional en tu edificio incrementa en dos puntos y medio el porcentaje de riesgo, porque aleja a las personas, hacia arriba, de la calle. Las viviendas de una o dos plantas, por lo contrario,  brindan un aura de seguridad a la vía (íd. 179, 181).

Cuando se tiene en cuenta la pobreza surgen otras cosas importantes. En 1994 se escogieron residentes de zonas muy pobres -con índices de pobreza de al menos un 40 por ciento- de Boston, Baltimore, Chicago, Los Ángeles y Nueva York. Se les presentó un programa denominado “Mudarse en busca de una oportunidad”. Lo que se pretendía averiguar era qué sucedía cuando se mudaban los residentes de los guetos a zonas con bajos niveles de pobreza. A los participantes se les dieron vales de ayuda, sólo eran válidos si la familia lograba encontrar un lugar para vivir en un barrio con un índice de pobreza menor al 10 por ciento. La oportunidad prometía una vida lejos del abandono, la pobreza y la delincuencia de los guetos. Cualquier diferencia que ocurriera en las familias debía ser atribuida a los efectos de la mudanza (íd. 181, 189, 190).

El experimento demostró que los barrios influyen mucho en algunos aspectos, y nada en absoluto en otros. Los adultos y niños que se mudaron a barrios más adinerados se sintieron mucho más seguros y felices. Los problemas de conducta cayeron entre las niñas y los niños, los ataques de asma descendieron, tuvieron cinco veces menos probabilidades de ser atacados o amenazados. Los adultos tuvieron menos depresión y su estado de salud mejoró. Sin embargo, los adultos no tuvieron mayores posibilidades de encontrar un empleo, y los niños no mejoraron su rendimiento académico después de mudarse (íd. 189, 190).

El barrio establece una gran diferencia en tu salud y felicidad. Tu barrio importa, pero no es tu sino. Los jóvenes que se mudaron en busca de una oportunidad se volvieron más felices, menos temerosos e incluso más sanos. Con el tiempo, quizá tengan más posibilidades de encontrar un empleo. Los que toman la decisión de mudarse comienzan una nueva vida (íd. 191).

Recomienda a tus amistades:

Incomodísimo.com

El Blog que te permite una lectura breve de un libro extenso.
El estilo, riqueza de contenidos, profundidad y sistematización de lo tratado hacen del libro de Tim hardford un objeto insustituible. Adquierelo en las librerías para enriquecer tu biblioteca.

Entender el mundo IV: «Geografía patológica»

21:20 Posted by Perro Senil.


Artículo de 1 ½ página de extensión.

Tim Harford. La lógica oculta de la vida. Editorial Planeta. Temas de Hoy. Bogotá, 2008. Páginas: 347. Adquirido en el Mesón de Ofertas de la Librería Europa, Maracaibo, Zulia, Venezuela. Precio irrisorio.

En los Estados Unidos la capital del país es una ciudad dividida. La jefa del departamento del Banco Mundial frente al mapa de Washington D. C. nos señaló un cuadrante y nos dijo “Toda esta zona es segura”, indicaba los barrios de Georgetown y Cleveland Park. Después tomó un bolígrafo y trazó una línea a lo largo de la calle Dieciséis. El bolígrafo atacó el papel, excavando una trinchera. Esa línea es objeto de controversia, al dividir por la mitad la Dieciséis deja, de un lado al Distrito Tercero en el que hubo en el año de 2005 veinticuatro homicidios, y si se mira de ese mismo lado  hacia el barrio de Anacostia y el Distrito Séptimo, nos advirtieron que no nos arriesgásemos a entrar, hubo sesenta y dos homicidios en dicho año.  Mientras que en Georgetown y Cleveland Park no hubo ninguno, estos dos barrios quedan en el lado opuesto (Hardford, 2008: 165, 166).


Uno  de los lados no sólo es menos letal, sino también es más agradable que el otro. Allí los niños que viven en la pobreza son quince veces menos que en Anacostia. El índice de pobreza absoluta es cinco veces menor. A esto se agrega algo más delicado, en el lado agradable un 80 por ciento es población de raza blanca y en Anacostia el 93 por ciento es de raza negra. Washington D.C. presenta bolsas de pobreza y segregación racial marcados en los barrios céntricos, esto es, una geografía patológica (íd. 166, 167).

En todos los Estados Unidos existe una conexión entre la geografía urbana y la raza, el resultado de esto, si se adiciona la criminalidad y la pobreza, es la existencia de guetos. Éstos  son zonas deprimidas atestadas de inmigrantes y afroamericanos, barrios que los blancos evitan. Nos interesa averiguar ¿qué es lo que produce esas zonas? Nuestra hipótesis es que esos barrios extremos son el resultado de personas que toman decisiones inteligentes mediante preferencias moderadas. Lo sorprendente es que esa racionalidad que emplea la gente corriente no es extrema, y sin embargo produce esos resultados tan pésimos (íd. 166, 167).

Esa extrema segregación racial que existe en algunas ciudades norteamericanas parece indicar la existencia de un racismo muy profundo. Pero las investigaciones apuntan que esa segregación por raza, por clase social y por nivel económico se puede imputar a prejuicios moderados que arrojan resultados trágicos (íd. 167). Para entender el mundo en este caso los investigadores han recurrido a la «teoría del juego».

Hazte con un tablero de ajedrez y con fichas blancas y negras, colócalas como se observa en la siguiente imagen:


Las fichas pueden representar blancos y negros, pero también pudiesen ser nativos e inmigrantes o ricos y pobres. En los cuadrantes de 3 x 3 cada uno de los residentes tiene en su zona ocho vecinos con los cuales constituye un barrio mixto. Como sus preferencias son moderadas, vive feliz en ese barrio, porque «los otros» no los superan, incluso, si los superan levemente como ocurre en las esquinas, no hay problema porque su preferencia es moderada, y esa actitud le permite mantener la armonía gracias a que es tolerante. Tales zonas son modelos de una sociedad integrada o concreción de la utopía de la integración (íd. 167, 168, 170).

Pero sí ocurren movimientos (mudanzas) y «los otros» llegan a superarlos de un modo amplio, entonces, se irían del lugar, porque ya no estarían contentos de su zona. La zona modificada se escapa de los límites de la tolerancia.  Por desgracia una sociedad es terriblemente frágil, por muchas razones la disposición alternada de las fichas puede alterarse y el barrio mixto pasa a convertirse en un barrio  de marcada definición por una raza, una clase social o un determinado segmento de nivel económico. Se crean guetos (íd. 170, 171).

Quita de tu tablero de ajedrez perfectamente integrado veinte fichas, las vas sacando al azar. Después añade  algunas de forma aleatoria, por ejemplo, coloca cinco. La pequeña diferencia que va a surgir resulta crucial, descubrirás de pronto que una ficha negra queda en su barrio con el doble de fichas blancas. Ese efecto que escapa de los límites de tolerancia producirá en una reacción en cadena de gente que se irá del lugar y el crisol de razas se disgrega -fin del barrio mixto o utopía-. Se desenmaraña la diversidad, y aparecen grupos homogéneos -guetos-. Las personas se mudan para evitar quedar aisladas (ídem).

Quien descubrió este sencillo proceso fue Thomas Schelling, él hacía uso de la «teoría del juego» para explicar la realidad. Schelling es célebre  con toda justicia, obtuvo el Premio Nobel de Economía en 2005. En este caso descubrió que en lo profundo de la «geografía patológica» una modesta preferencia por tener vecinos semejantes a ti puede conducir a una segregación extrema. En otras palabras, las causas moderadas podrían conducir a resultados extremos. El tablero depende de tu forma de ser, y sólo basta que tengas una preferencia moderada para que la línea controversial se trace como la que existe con la calle Dieciséis en Washington D. C. (íd. 171,172).

Recomienda a tus amistades:
Incomodísimo.com

El Blog que te permite una lectura breve de un libro extenso.
El estilo, sistematización, riqueza y sentido original es insustituible. Adquiere el libro para tu joyel.


Entender el mundo III: «Ratas racionales»

7:03 Posted by Perro Senil.


Artículo de 1 página de extensión.

Tim Harford. La lógica oculta de la vida. Editorial Planeta. Temas de Hoy. Bogotá, 2008. Páginas: 347.
Adquirido en el Mesón de Ofertas de la Librería Europa, Maracaibo, Zulia, Venezuela. Precio irrisorio.



La gente planifica, calcula y sigue una estrategia no sólo para las cuestiones de la cartera sino también para las del corazón. Los cálculos que realizamos son complejos, pero a menudo lo hacemos inconscientemente, como ocurre cuando alguien lanza una pelota y, para que la atrapemos nuestro cerebro resuelve ecuaciones diferenciales, para determinar dónde va a caer. Esas ecuaciones muy pocos las harían con lápiz y papel, pero todos las realizamos con el inconsciente (Hardford, 2008: 32). Somos seres calculadores, del mismo modo, gracias a nuestra racionalidad,  planificamos y seguimos una estrategia. Atrapar la pelota muestra las cualidades de la racionalidad inconsciente que está dentro de nuestro cerebro. Actuamos con una lógica en nuestras vidas. Pero la existencia de lógica de la vida no se limita al mundo humano. 

La teoría de la elección racional es una herramienta para comprender el mundo, más allá de lo que cabe imaginar. A principios de la década de los setenta los investigadores empezaron a preguntarse cuán inteligentes son los animales en realidad. Pusieron a disposición de  ratas de laboratorio dos tipos de bebidas, una era la favorita de estos animalitos, la otra era de un sabor amargo que consumían pero no les agradaba. A partir de esta base de consumo que establecieron querían averiguar si ¿Pueden las ratas planificar, calcular y realizar elecciones si se les proporciona un salario, precios y un presupuesto?, es decir, ¿existe una racionalidad económica dentro de los cerebros de las ratas expuestas a estímulos y compensaciones? (íd. 40, 41).

Los investigadores pusieron a cada rata en el laboratorio un expendedor de bebidas, éste tenía dos palancas, una para la bebida favorita y otra para la bebida amarga. Las ratas aprendieron a obtener bebidas ejerciendo presión en las palancas. Aprendieron, además, que las palancas ofrecían diferentes cantidades de bebida. Esa situación se traducía en salarios y precios. Si la palanca proveía menos cantidad de líquido era porque el precio había subido. En este experimento se colocó un límite a las veces que se podía presionar la palanca por sesión, es decir, se asignó un salario. La bebida amarga era más barata, esto es, proveía de mayor cantidad de líquido u ofrecía una ración generosa. Sí la rata esta sedienta, y es inteligente, deberá oprimir la palanca de la bebida barata y conformarse con una ración muy modesta de la bebida agradable, porque deberá lograr que su salario le alcance para satisfacer sus necesidades vitales. Y eso fue precisamente lo que lograron estos ratones, es decir, calcularon con éxito (íd. 42).

Los experimentadores subieron el precio de la bebida amarga, es decir, ahora obtenías menos por tu dinero. La racionalidad indica en ese caso que deberás aumentar tu gasto en la bebida desagradable y, esto lo haces porque debes ajustarte a un presupuesto. Debes actuar con criterio económico y aceptar tu empobrecimiento, consumiendo cada vez menos tu bebida favorita, por supuesto, ¡sí eres inteligente! Eso es exactamente lo que hacen las ratas racionales (íd. 43).

Un «bien de Giffen» es aquel que cuando aumento su precio también lo hace su demanda. Este tipo de bien  es dramático y paradójico, porque el aumento de los precios genera más pobreza entre quienes dependen de un salario y la pobreza genera más demanda de los productos básicos para su subsistencia. Cuando se refiere a la dieta, un bien Giffen, serían por ejemplo las patatas, lo que se traduce en comprar más patatas y menos queso para rellenarlas. Las ratas habían resuelto en el laboratorio el enigma de Giffen al decidir por la opción más inteligente, y su decisión racional les permitió sobrevivir. Las ratas fueron intelectualmente brillantes en su habilidad intuitiva y atraparon exitosamente los lanzamientos de la pelota -atrapar la pelota- que le hacían los experimentadores que ponían a prueba su racionalidad económica (íd. 43, 44).

Recomienda a tus amistades:

Incomodísimo.com

El Blog que te permite una lectura breve de un libro extenso.
La lectura del libro original es insustituible por: su estilo literario, la sistematización de su idea brillante, la abundancia de conocimiento relevante y la prodiguidad de información y datos. Adquiere este libro para tu biblioteca selecta, con ella labras un núcleo duro para construir una sociedad del conocimiento. Con aprecio, Perro Senil, Jefe de Redacción de Incomodísimo.com


Entender el mundo II: «La lógica de la vida»

5:06 Posted by Perro Senil.


Artículo de 1 página de extensión.
Tim Harford. La lógica oculta de la vida. Editorial Planeta. Temas de Hoy. Bogotá, 2008. Páginas: 347.
Adquirido en el Mesón de Ofertas de la Librería Europa, Maracaibo, Zulia, Venezuela. Precio irrisorio.

La gente racional responde a las compensaciones y a los estímulos. Cuando los costes o los beneficios de algo cambian, la gente modifica su comportamiento. Las personas racionales piensan en el futuro, tanto como en el presente, ya que intentan predecir las probables consecuencias de sus acciones (Hardford, 2008: 22).


Para entender al mundo el economista no puede restringirse a observar el comportamiento de la Bolsa de Valores o los índices de inflación, su mirada se puede posar sobre el comportamiento del hombre y la mujer en sus múltiples y variadas relaciones, en las cuales los valores ocultos representan costes, beneficios y presupuesto. Esos valores determinan comportamientos sexuales, delictivos, lúdicos, belicosos, afectivos, excluyentes, discriminatorios, ideológicos o históricos que nos revelan la lógica de la vida que subyace en nuestras acciones. La «nueva economía» observa ahora el mundo con otros ojos, y desde ellos mira escenas de profundo sentido económico como la que atrapa esta hermosa fotografía.
El coste de las relaciones sexuales es más elevado que antes a causa de la propagación del VIH/SIDA. Cuando  el precio sube se reduce el consumo. El número de adolescentes vírgenes creció más de un 15 por ciento en los Estados Unidos desde principios de los años noventa. También el uso de la píldora anticonceptiva se redujo, al tiempo que aumentaba el  empleo de preservativos.  Es la lógica de la vida que responde a un comportamiento racional muchas veces inconsciente (íd. 23, 24).

El control de la natalidad también asociado a las relaciones sexuales tuvo respuestas semejantes. Los estados norteamericanos donde la norma del aborto adolescente se condicionó al consentimiento de los padres, puso más difícil a las jóvenes abortar, entonces, se desalentaron las prácticas sexuales de riesgo. Por el contrario, en aquellos estados donde el embarazo no deseado puede ser interrumpido sin decírselo a los padres, la tasa de abortos se mantuvo alta. Las adolescentes responden de manera racional ante el riesgo. El sexo, por tanto, tiene un coste que las adolescentes calibran (íd. 25).

¿Qué hace un economista fisgoneando en estos asuntos? Hay una innovadora generación de economistas que está descubriendo algo nuevo referido al sexo, la delincuencia, los juegos de azar, la guerra, el matrimonio, los guetos, el racismo, la política y la historia de la humanidad, para entender el mundo. Sobre el trabajo de estos autores es que trata este libro, ellos intentan ver cómo funciona el mundo. Para los efectos emplean la  «teoría de la elección racional», con la cual hacen la economía de todas las cosas (íd. 27/29).

Cuando resulta más difícil hacer algo, la gente tenderá a hacerlo menos; cuando resulta más fácil, se inclinará a hacerlo con más frecuencia. Sopesan sus opciones y tienen presente las limitaciones, como el presupuesto total con el que cuentan (íd. 29). Los costes que valoran no sólo tienen que ver con dinero, la adolescente valora costes y beneficios de las relaciones sexuales, es decir, riesgos y goces. En cuanto  al presupuesto total la gente no sólo piensan en la disponibilidad monetaria depositada en su cuenta bancaria, sino que valora el tiempo de que disponen, la energía que sienten, el talento que les acompaña y la atención que tendrán que dispensar en el asunto en el que están enfocados. Incluyen, en su racionalidad, el coste futuro. Y todo esto determina como actúan para seleccionar el sitio dónde se mudarán,  las relaciones sexuales que practicaran habitualmente, las violaciones de la ley que se permitirán… es decir, lo que harán o no en la vida (íd. 30).

La lógica de la vida subyace a todo lo  que hacemos. Actuamos como economistas. Calculando costes y beneficios, y valorando el presupuesto total del que disponemos.

Recomienda a tus amistades:

Incomodísimo.com

El Blog que te permite una lectura breve de un libro extenso.

Sin embargo, advertimos, es insustituible la calidad de las autoras o autores, su riqueza temática, la estética de su estilo y la profundidad de su análisis. Leed el original.

Entender el mundo I: «Teoría de la elección racional»

4:11 Posted by Perro Senil.


Artículo de 1 página de extensión.
Tim Harford. La lógica oculta de la vida. Editorial Planeta. Temas de Hoy. Bogotá, 2008. Páginas: 347.
Adquirido en el Mesón de Ofertas de la Librería Europa, Maracaibo, Zulia, Venezuela. Precio irrisorio.

Vivo en un barrio poco refinado. La casa del mecánico está abarrotada de chatarra, hay casa de apuestas y salones de masajes, y las aceras inmundas de un bar. En el club nocturno de mala reputación asesinaron a un joven a balazos. Yo que soy un economista reparo en los apostadores, prostitutas, bebedores y pandillas, sólo que los veo con otros ojos. Los economistas buscamos la lógica que se esconde detrás de las decisiones que se toman en la vida, es decir, las ocultas decisiones racionales (Harford, 1908: 15).

Si  queremos entender nuestro mundo o como cambiarlo, hay que comprender la «Teoría de la elección racional». En mi barrio es peligroso cruzar algunas calles muy transitadas, carecen de paso de peatones, resultado de una política fallida. El Gobierno local administra éste y otro barrio, en éste es abundante la pobreza, en aquel hay gente adinerada. La calle principal de aquel barrio no tiene uno sino tres pasos peatonales. Tal vez los adinerados de aquel barrio utilizan sus influencias sobre los funcionarios gubernamentales y, así obtienen que su barrio sea el producto de políticas exitosas. O en aquel barrio el típico vecino es dueño de su propia casa, piensa vivir allí durante mucho tiempo y tiene mucho que ganar si se realizan mejoras en su barrio. Tienen incentivos para ser políticamente activos (íd. 15 y 16).  
Pero hay que seguir desconchando las capas del problema, para revelar en toda su dimensión la sorprendente verdad. Cuando un pedófilo se muda al barrio, el valor de las casas en la manzana donde éste se residencia desciende de precios. Nadie quiere tener por vecino un pedófilo. No obstante, para tomar nuestras decisiones tenemos valores ocultos. ¿Admitirías que una hipoteca un poco más barata mitigaría la indignación que te produce un pedófilo que vive a la vuelta de la esquina? El hecho es que el precio determina que adquieras tu vivienda, porque éste sirve de compensación del costo que representa ese vecino indeseable. Al economista le interesa conocer la existencia de esos valores ocultos, porque estos explican la lógica de la vida (íd. 17).

Es uno de esos raros economistas, que no andan pendientes de las cotizaciones de las Bolsas de Valores o por la estadística sobre la inflación, sino que reparan con deleite en los comportamientos del ser humano y en los costos y beneficios no monetarios que este recibe en su vida social. En otras palabras Tim Harford es otra de las grandes figuras que se interesan por aplicar y divulgar la «nueva economía» para explicar la aparente confusa realidad.

Estas decisiones racionales pueden ser inconscientes, pero hasta los adolescentes las toman porque ese comportamiento racional se ha generalizado. Las elecciones racionales subyacen en nuestros comportamientos. En manos de los economistas, la «teoría de la elección racional», produce una imagen radiográfica de la vida humana. Esa imagen muestra algo que no pudiste ver antes (íd. 18).

¿De dónde nos vienen nuestras motivaciones para hacer una elección sobre cualquier cosa?  Las pasiones y principios son las que nos mueven en una y otra dirección. El mundo que la economía explica no es un mundo sin amor o cualquier otra emoción. Las decisiones que la gente toma expresan muchos de los misterios de la vida. Y la vida se explica por la existencia de una lógica racional o “La lógica oculta de la vida” (íd. 19).

Recomienda a tus amistades:

Incomodísimo.com

El Blog que te permite una lectura breve de un libro extenso.

Acá se muestran las líneas maestras, pero jamás sustituimos la calidad y la profundidad de las autoras o autores, la lectura del original es el placer total y genuino.  

Revolución de la riqueza IX: «El juego» (d)

21:00 Posted by Perro Senil.


Artículo de 5 páginas de extensión.

Incomodísimo.com China

El sistema de riqueza de la segunda ola está en retirada. La tercera ola que se inició en Estados Unidos, ha atravesado en unas pocas décadas el Pacífico y transformado a Asia. En los próximos años, veremos cómo llega a las costas de América Latina y África. Las señales están a la vista. Detrás de esta transformación del mundo se encuentran  cambios sin precedentes en los fundamentos profundos de la riqueza. En ninguna parte está más claro que en el histórico auge de Asia y en el gran despertar de China (Toffler, 2007: 433).

Asia se está transformando, hoy sus capitales son los íconos del mañana. En la vista: Taipei, capital de Taiwan.

Asia es el hogar de seis de las diez economías de crecimiento más rápido de la última década. También es el hogar de la inmensa mayoría de los musulmanes del mundo y, la región más rodeada de armamento nuclear. Sobre todo es el hogar de China (íd. 433).

Lo que ocurra allí redistribuirá radicalmente la riqueza y convulsionará el mundo. En 2004, China había superado a Japón y se había convertido en la tercera nación en importancia comercial del mundo, por detrás de Estados Unidos y Alemania. China tenía más de quinientos mil millones de los tres billones y medio de dólares de reservas mundiales en divisa extranjera. Poseía casi ciento setenta y cinco mil millones de dólares en bonos del Tesoro de Estados Unidos, cantidad superada sólo por Japón, lo que la situaba en posición de convulsionar la economía global si decidiera sustituir los dólares por euros o por una cesta de otras divisas. China se ha convertido en una fuerza gigantesca sobre la economía mundial (íd. 434).

El Oriente es hoy el sinónimo del mundo emergente. En la vista: Singapur.

¿Se convertirá China en la superpotencia mundial de 2020, como tantos pronósticos apuntan? La sabiduría convencional atribuye su progreso a la ruptura con el comunismo y su transición hacia una economía de mercado. Esa explicación no basta. China no puede ser descrita como una economía de mercado. Otra razón importante de la espectacular actuación de China puede hallarse en su estrategia de desarrollo en doble pista (íd. 434, 435).

China necesitaba algo más que fábricas, necesitaba también su sector de alto valor añadido, conocimiento intensivo y alcance mundial. Para hacer que dicha política funcionara, China tenía que comprimir el tiempo. También ampliar su dimensión espacial. Y necesitaría tecnologías de la información, las telecomunicaciones y la digitalización avanzadas, así como acceso al último conocimiento económicamente relevante. La estrategia de China se ha centrado en los tres fundamentos profundos en que hemos hecho hincapié: el tiempo, el espacio y el conocimiento. China se ha vuelto diestra en el uso de la velocidad como arma en el comercio internacional… China se hace con un mercado  tan rápidamente que ni te enteras (íd. 435).

China ha desarrollado una de las infraestructuras de telecomunicaciones más avanzadas del mundo. Importa tecnología, la estudia, la imita y la mejora. A continuación desarrolla capacidades tecnológicas autóctonas base para desarrollar una mayor capacidad de innovación. China no se limita a la tecnología y las tácticas empresariales. Forma parte de la nueva cultura del país la carrera hacia adelante. Para la mayor parte de los chinos más jóvenes, el cambio no se produce con rapidez suficiente (íd. 436).

China y la India están a la cabeza de un mundo nuevo, muestra de esa nueva realidad planetaria es Corea del Sur. En la vista: Seul.

China ya no se considera a sí misma una potencia asiática. Se plantea crear una zona asiática de libre comercio, pero sus ambiciones son mundiales. Las reformas de las décadas de 1980 y 1990, su apertura a la inversión extranjera, su ingreso en la Organización Mundial del Comercio y la impresionante expansión de sus importaciones y exportaciones, hacen prolijos sus vínculos con el mundo. Compite con los fabricantes de componentes electrónicos mexicanos, de ropa indonesia o de hilo de cobre colombiano. También está animando a sus empresas de alta tecnología a salir y conquistar el mundo. Lenovo, su principal fabricante de PC, compró la división de fabricación de PC de IBM. Huawei, su gran empresa de tecnología de la información, se jacta de tener diez mil trabajadores en investigación y desarrollo (I+D) y de mantener laboratorios en la India, Gran Bretaña, Suecia y Estados Unidos. Está asociada con Intel, Microsoft, Siemens y Qualcom para producir equipos de comunicaciones. En 2003, China había puesto en marcha más de tres mil cuatrocientas empresas en ciento treinta y nueve países distintos. En 2004 se esperaba que se hubiera convertido en el quinto mayor proveedor mundial de inversión extranjera directa de otros países, eclipsando incluso a Japón. Visita a Sudamérica prometiendo inversiones significativas, en el propio partió trasero de las Estados Unidos (íd. 436, 437).

China está concentrada en su expansión económica y también ejecuta un enorme presupuesto militar, que podría haberse sextuplicado entre 1991 y 2004. Adquiere aviones no tripulados. Dispone de misiles nucleares que pueden alcanzar objetivos en Estados Unidos, e intenta transformar su armada equipándola con armamento nuclear capaz de llevar a cabo operaciones cada vez más lejanas. Incluye en sus planes la construcción de una serie de bases estratégicas y diplomáticas a lo largo de las principales rutas marítimas desde  el mar del Sur de la China hasta el rico en petróleo Oriente Próximo. Tienen previsto en estos planes militares la construcción de un puerto en Pakistán para tener controlada la garganta del Golfo del Pérsico, la construcción  de instalaciones de inteligencia en las islas Myanmar y la construcción de un canal en Tailandia para proporcionar una alternativa a la ruta del petróleo. China también extiende su influencia en el espacio (íd. 437,438).

China planifica desarrollos urbanos, uno de ellos es en Beijing, con metro, tranvía, caminerías, carriles para bicicletas, estaciones de tránsito múltiples, varios parques públicos, lugares de interés cultural, mínimo de emisiones de carbono, utilización de energía geotérmica... son ciudades de diseño ecourbano.

En China hay una voraz persecución de know-how relevante para producir riqueza. Se ha convertido en un líder mundial en la creación, compra y robo de datos, información y conocimiento. Hoy gracias a esa piratería y a sus otras artes proliferan los laboratorios de investigación actualizados, y el gasto en I+D subió en 2003 un 19,6 por ciento respecto al año anterior, y la financiación para la investigación básica creció un 18, 8 por ciento, a escasos tres puestos más debajo de los Estados Unidos. Hace veinte años atrás desmontaban los primeros ordenadores occidentales para comprender su funcionamiento y llevaban a cabo los primeros experimentos con fibras ópticas (íd. 438, 439).

Hoy (2005/2006) miles de científicos formados en los Estados Unidos preparan la vuelta a casa. Dentro de cinco años Estados Unidos todavía seguirá siendo el centro mundial de la investigación empresarial, pero para entonces China ya estará por delante de Gran Bretaña, Alemania y Japón. Para hacer negocios en China, las empresas extranjeras tenían que transferir tecnología, y muchas aceptaban hacerlo a cambio de tener acceso, por limitado que fuese, al inmenso mercado chino. Las universidades chinas ofrecían más de sesenta máster en administración de empresas, muchos de ellos en asociación con prestigiosas universidades estadounidenses. Sesenta mil extranjeros que viven y trabajan en China también transfieren conocimiento. De modo que detrás del formidable impulso de China se encuentran actitudes que confirman su intención de crear la economía basada en el conocimiento más importante del mundo. Hechos semejantes hacen pensar en una China imparable en su corta marcha de doble pista hacia la condición de superpotencia  (íd. 439, 440).

En China está en crecimiento una población de tercera ola, compuesta por jóvenes de clase media, instruidos y convencidos de que esa es la ola del futuro. Rodeados de brillantes centros comerciales y con formación en materia de ordenadores e internet. Son la base para llevar a cabo las técnicas que el Ejército de Liberación Popular ha llevado a cabo en un profundo estudio en el terreno de la información. La teoría sostiene que es factible una guerra que ya no dependa solo del ejército, sino de cientos de millones de ciudadanos a los que se unirían simpatizantes de otros países, donde todos juntos podrían usar sus ordenadores portátiles para crear superordenadores, para asaltar infraestructura vital del enemigo, como redes financieras y otros objetivos civiles, es una sorprendente versión de lo que Mao llamaba la «guerra popular» (íd. 443 y 444).

China no puede evitar el conflicto de olas. Pero interesa el modo de gestionar la colisión de las olas de riqueza tendrá efecto en los empleos, los ingresos, los productos y los ordenadores que usamos. China forma parte ahora mismo de todos nosotros (íd. 445, 449).  107/110

Uno de los mayores cambios geográficos de la riqueza en la historia está teniendo lugar en la actualidad. El resultado es un período de turbulencia espacial (!!!). Esta creciente movilidad de la riqueza afectará los empleos, la inversión, las oportunidades empresariales, la estructura de las empresas, la situación de los mercados y la vida cotidiana de la gente corriente en todo el mundo. Y determinará el destino de las ciudades, países y continentes enteros (íd. 107).

Hace cinco siglos era China la que disponía de la tecnología más avanzada, y Asia lideraba el mundo con el 65 por ciento del producto económico global. En 1405 una flota de trescientos diecisiete barcos, tripulados por veintisiete mil marineros y guerreros, zarpó para realizar siete extraordinarios viajes de exploración.  Según la historiadora Louise Levathes, mandaba la flota el almirante Zheng He, Exploró las costas de África, el Oriente Próximo y sentó las bases navales para el comercio chino por todo el océano Índico (íd. 107 y 108).

Habrían de pasar dos siglos y medio antes de que la Ilustración y la primera revolución industrial lanzaran la transición de la segunda ola que trasladó gradualmente hacia Europa el centro del poder económico, político y militar. Pero este no permaneció allí, porque, hacia finales del siglo XIX, el centro de la creación de la riqueza mundial empezó a trasladarse más hacia el oeste, a Estados Unidos. El siglo XX era ya «el siglo americano» (íd. 108).

Pero el trasvase de la riqueza hacia Asia empieza con Japón, y más tarde a países como Corea del Sur, y fue cobrando mayor espacio y fuerza en el curso de las décadas siguientes. El giro  se completó en la década de 1990, cuando las inversiones extranjeras directas (IED) llovieron. En 2002 el torrente de IED era «poco menos que milagroso». En 2003, China se convirtió en el mayor receptor de IED, superando incluso a Estados Unidos. En 2005, las IED en China se estimaban en unos sesenta mil millones de dólares. El notable auge de China es un tributo a la laboriosidad, la inteligencia y la innovación de sus gentes (íd. 108, 109).

Asia marcó un hito: el PIB conjunto de China, Singapur, Corea del Sur y Taiwán es casi igual al de Alemania, Francia, Gran Bretaña, Italia y España, las cinco economías mayores de Europa. Y ese cálculo no incluía a Japón ni la India; de haberlo hecho, los seis estados asiáticos hubiesen alcanzado un PIB mayor que el de los veinticinco miembros de la Unión Europea o el de Estados Unidos (íd. 109).

Asistimos, por tanto, a lo largo de estos siglos a una extraordinaria creación de riqueza que pasó el poder de China a Europa occidental y de ahí a Estados Unidos, pero luego -en nuestros días- ocurre el cierre de un gran círculo histórico que devolvió a Asia el predominio económico perdido siglos atrás (íd. 109).

Incomodísimo.com piensa que es probable que:

a) los numerosos países latinoamericanos frustrados por las expectativas truncas que han sufrido buena parte del siglo XX, b) la África azotada por los abusos de las grandes potencias mundiales, c) los países escandinavos y otros países europeos acostumbrados a sus sociedades igualitarias -estilo sueco-  y por el aprecio a la vida lenta, sana y humanizada, d) los países del este europeo que vivieron el socialismo real, e) todos ellos conjuntamente con China y la India liderizando al Asia-Pacífico

aspiren en determinado momento ir más allá de un simple cambio del orden internacional, y avancen decididos hacia un  multiculturalismo global que pondría en reversa la expansión de la civilización occidental para abrir paso a una nueva manera de entenderse y reconocerse. De allí que este Blog esté de acuerdo con estos autores:

Heidi y Alvin Toffler apuntan que lo que sobrevendrá en el planeta con la sociedad del conocimiento será más profundo que una revolución (íd. 167).
La pregunta inquietante:
¿Aprovechará su actual crecimiento económico la América Latina, para incorporarse como actor determinante del futuro orden mundial en «El juego» de ajedrez que está en pleno desarrollo?

Incomodisimo.com es del parecer que para que Nuestra América participe de esta palpitante historia, es un requisito imprescindible que nuestras sociedades se vuelquen hacia el conocimiento como el principal «foco de atracción».

La disrupción es la nota resaltante del novedoso proceso que está en emersión.

Alvin y Heidi Toffler. La Revolución de la riqueza. Editorial Random/Mondadori DEBATE, Caracas. Edición 2007. Páginas: 651. 

Adquirido en el Mesón de Ofertas de la Librería Europa, Maracaibo, Venezuela. Bs. 25.

Recomienda a tus amistades

Incomodísimo.com

El Blog de lectura breve de libros extensos.